Esta es la tercera y última entrada de la primera serie dedicada a animales de plástico, ya que curioseando en la red he descubierto todo un potencial que desconocía. Para fabricar un perchero como el de la foto sólo hace falta un listón de madera y unos cuantos animales de plástico en desuso que tendrías que cortar por la mitad sin miramientos (yo no podría y mi hijo nunca me lo perdonaría). En las imágenes no aparecen sosteniendo mucho peso, me temo que su resistencia varía en función de la densidad del plástico y de la calidad del pegamento de contacto. Como se puede apreciar en algún ejemplo, son idóneas para colgar bisutería y accesorios, pero donde mejor quedan es en las habitaciones infantiles. Si te sobran figuras pequeñas, anímate a elaborar un perchero inspirándote en este álbum:
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