Otra decoración invernal natural y sencilla. Con unas tijeras de podar podrás cortar algunas ramas sobrantes en fragmentos de 4 tamaños distintos con los que montar los rústicos copos de nieve de la imagen superior (en el enlace puedes seguir el tutorial en inglés). Una pistola de cola caliente ayudará a unir las piezas, y algunos botones, trozos de cuerda y acículas de pino completarán esta original decoración. Hay ejemplos del álbum que aparecen pintados de rojo, blanco o dorado, otros incorporan pequeñas luces. Todos quedan muy bien, pero me llaman especialmente la atención los que usan ramas verdes, evitando el pegamento termofusible y consiguiendo un efecto mucho más boscoso e impactante, aunque también más efímero. Elige entre los distintos acabados que te muestro cuál te convence más como decoración festiva:
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