Espero que te guste tanto como a mí la casa de invitados que Alisha Graham y Finney Irwin remodelaron durante 5 años en la localidad costera de Fairfax, California. Originalmente era un bungalow de 1920 situado detrás de su vivienda y sujeto a una normativa local que obligaba a mantener la estructura de 30 m2 de planta. Tanto Alisha como Finney trabajan en el campo del diseño y entre los dos planificaron al milímetro unas muy acertadas soluciones de almacenaje y funcionalidad lo más ecológicas posible.
La altura del techo permitió la creación de un pequeño loft al que se accede mediante una escalera deslizante de madera, con un dormitorio muy luminoso gracias a la ventana del tejado y a las dos decorativas vidrieras. También se pudo crear un gran espacio de almacenaje vertical en la pared opuesta empotrando armarios de gran capacidad.
Tras la puerta de espejo del armario se oculta una inesperada cama doble que, cuando está plegada, deja espacio para una zona de comedor en la que caben hasta 4 personas abriendo las dos hojas de la mesa abatible color turquesa. Una vez montada la cama, se dispone de dos amplios dormitorios en un reducido espacio.
La cocina cuenta con todo lo necesario y el baño dispone de bañera. La zona de estar consiste en un cómodo sofá con un arcón de madera que hace las veces de almacenaje y mesa de centro. El cuadro con la palabra OOFTA es un homenaje a una expresión sueca que empleaba la abuela de Alisha y que significa algo así como ¡UAU!.
A la reforma no le falta detalle, está muy bien planificada y adaptada. En espacios pequeños son muy importantes los techos altos, los espacios abiertos con mucha luz y el blanco. En esta vivienda, los cuidados textiles, los muebles recuperados y los detalles decorativos son los que aportan color, calidez, alegría y encanto bohemio. Si a ti también te entran ganas de vivir en ella a pesar de su reducido tamaño, puedes disfrutarla al completo en el siguiente álbum:
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